Con el paso del tiempo, la hoz deja de ser uno de los utensilios primordiales y necesarios para la recogida de la cosecha agrícola debido al posicionamiento en el mercado de la maquinaria agrícola.

La mano de obra aumenta, y las hoces escasean en las labores agrícolas españolas, hecho que propicia realizar exportaciones a mayor escala a fin de que el negocio sea rentable. Este hecho hizo que nuestra empresa cambiara su sede a Tetouan (Marruecos) en el año 1995, lugar donde nos encontramos en estos momentos, continuando su negocio con la tercera generación familiar, Eladio Reguillo Maroto, Director Gerente, y Mariano Reguillo Lara, alcanzando con este último la cuarta generación en la producción de hoces.

La fabricación de hoces en este país los hace producir una herramienta de igual calidad que la española, pero más competitiva por su bajo costo en fabricación.

De igual forma, y siguiendo con esta estrategia de mercado, podemos hacer frente a los países asiáticos, hoy día primeros en el mundo por sus precios, pero no por su calidad.